Como lluvia traspasa tu ventana
mi alegría salpica tu cariño
con la sonrisa jocosa de niño
que descubre tu pena mas liviana.
Como la llave que abre tu puerta
mis besos empujan tu conformidad
agrandando tu fuerza de libertad
y te mantiene por siempre despierta.
Como las flores que adornan tu sala
tu mirada me complace de gloria
con esa añoranza de colegiala.
Como marcas la línea divisoria
de esa amistad de la que haces gala.
Me conozco tu casa de memoria.
Javier Pérez-Ayala Huertas