Pueden estas puertas lluviosas, saludable y triste, encerrarme ensu cuarto sangrante de humedad, para que broten los pensamientos enfértil papel. Es el romanticismo mi enfermedad, o unsíntoma de la enfermedad fatal , mi vida. Será este laesencia que me corroe, que me oxida , que me seduce…

Que será de mi corazón , si no se alimenta de tu bruscarespiración….

Desnudo mi grito a los astros que se muestran lejano con su brillo,pues ya no me satisface su fulgor, pues tengo una perla a mi lado
esparce mi pensamiento el viento, que descalza mis palabras….este es el comienzo….

Surcan las fajas briosas, respirando en reflejos irizados, anteeste espacio
y es este pegaso , quien te pasea entre nubes, celosas de tu figuranacaradacomo quisiera protegerte , como la armadura caliza de las ostras.

Este corcel de las musas, que nació de mi romance épico,pues tu salvaste a tiempo mi corazón, de secarse en mi pechodesértico
es ella la luz carnal, la joya que difunde el color del mar….

Mi piel no es de nácar, pero me desangraría hasta secarmepor ti,no logro encerrar este niño amor, con las cercas de estaamistad, me lo impide su belleza
su narciso nombre que brota del suave mare magnus…

Como olvidarte, si el eco de tu brillo, sigue encerrado en misparpálidos ojos ,y es tu contorno reflejo el que me brinda la ilusión en cadanoche que me cubre de ensueños…

Y me pregunto una y otra vez como terminaré…

Kewois